Quién dice que los vegetarianos no pueden tomarse unas riquísimas albóndigas, llenas de proteinas, minerales, vitaminas y fibra? Además, estas son veganas, (sin huevo ni lácteos), y sin gluten, ...así las come todo el mundo.
La textura de las albóndigas de mijo me gusta mucho más que las de quinoa o amaranto. Para cocinar el amaranto, prefiero hacerlo en tortitas, y la quinoa, tipo cous cous. Por ahora lo hago así, pero sigo aprendiendo día a día nuevas recetas. Como un pastel de quinoa y manzana que hice el otro día...y que ya os enseñaré.
Hemos tenido muchos líos, idas y venidas, así que no he podido estar muy atenta al blog. Pero hoy es el día, y aquí va la receta.
(Receta basada en masalladelgluten: bolitas de quinoa).
INGREDIENTES: (Salen unas 12 albóndigas).
- 1 taza de mijo.
- 2 tazas de agua o caldo de verduras.
- 1/2 dado de verduras ecológico (si utilizáis el caldo de verduras, este ingrediente no lo ponéis).
- gomasio o sal marina.
- 1/2 taza de copos (quinoa, amaranto, trigo sarraceno, mijo).
- 1/2 taza de harina de arroz.
- 1/4 taza de perejil picado (fresco y ecológico).
- 2-4 cucharadas de agua.
PARA LA SALSA:
- 1/2 cebolla grande.
- 5-6 zanahorias.
- aceite de oliva virgen extra.
- sal marina y pimienta negra.
- 1 taza de guisantes cocidos.
- 1/2 taza de patatas en trozos.
PREPARACIÓN:
Ponemos a hervir el agua con el dado, o bien el caldo vegetal. Cuando hierva, añadimos el mijo, y dejamos cocer a fuego medio unos 10-12 minutos, hasta que se haya absorbido todo el líquido. Retiramos y dejamos enfriar.
En una sartén, ponemos un hilo de aceite de oliva (podéis utilizar también agua), y pochamos la cebolla finamente picada. Añadimos las zanahorias y las patatas, y dejamos que se vayan cocinando.
Cuando están blanditas, ponemos sal marina y pimienta al gusto, y pasamos todo por un procesador hasta obtener una crema.
Añadimos los guisantes y lo ponemos a fuego muy suave.
Por otra parte, mezclamos en un bol el mijo con los copos, el perejil, el gomasio o sal marina y la harina de arroz (esta última la vamos echando poco a poco para que se vaya absorbiendo). Añadimos el agua y mezclamos bien. Nos va a quedar una mezcla pastosa y muy manejable.
Formamos las albóndigas y las cocemos unos minutos en agua hirviendo. A mí después me gusta tostarlas un poco en la sartén con unas gotas de aceite.
Cuando están listas, las añadimos a la salsa y dejamos reposar, para que se mezclen bien los sabores.
¡A disfrutar!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Déjanos aquí tu comentario: